Una imagen vale más que mil palabras, ¡pero un video, un millón!
Nunca se sabe cómo puede evolucionar una aventura empresarial... pero siempre recordará el punto de partida, y este fue el nuestro.
La ilusión de romper con el turismo tradicional convirtiéndose en parte del destino y no solo viendo las cosas desde el exterior, el objetivo innovador de sumergir al turista en las fiestas regionales locales, viviéndolas exactamente igual que los locales.
Pero como dijimos antes… ¡un video vale más que un millón de palabras!